La verdad es que los sindicatos españoles tienen una malísima prensa en la extrema derecha y sus acólitos plumillas. Pero es que además la nefasta actuación de los mal llamados piquetes informativos, aquellos que en teoría intentan defender el derecho de huelga de todos los trabajadores utilizando medios legítimos como la información o el convencimiento, les da tristemente la razón, como en el caso d que nos ilustra el vídeo en el que durante la huelga general del día 14, un piquete informativo de ‘trabajadores’, informan a la encargada de un establecimiento, durante 7 minutos, de que si no cierra por las buenas, quizás lo tenga que hacer por las malas.
Lo podemos calificar, como poco, de cobardía y todo ante la mirada impávida de la policía, pero el que haya gamberros de todas las edades y sexos hace que ciertos personajes como Hermann Tertsch se explayen. Cuánta bilis debe almacenar este hombre que todos los día siente esa necesidad de verterla al exterior, cuánto veneno destila en una sola dirección, y menos mal que se ha encontrado un eficaz antídoto en el Gran Wyoming, quizá excesivo y desbocado a veces.
Aquí vemos cómo Hermann T. empareja a Zapatero, a Mas, a los piquetes y a Gordillo: