El asunto de la proliferación de banderas nacionales con motivo de la celebración de los Mundiales de Fútbol ganados por España y cuya exhibición fue en aumento a medida de que nos íbamos aproximando a la Final, y que ha hecho que el PIB de China haya aumentado unas décimas al ser el máximo productor de las mismas, y que se han visto en lugares donde es muy difícil verlas e incluso las que se ven las queman o, en el caso de la Región Vascongada, tienen que izarse después de décadas de resoluciones judiciales, el asunto de las banderas, digo, está trayendo cola y, claro, los listos de turno, entre los que se encuentra el sevillano Antonio Burgos, no pueden dejar pasar la ocasión de resaltar el fenómeno y los contrastes aunque tirando por los suelos aquella otra enseña, la republicana, que a muchos españoles gusta porque la hacen coincidir con sus ideales políticos tan legítimos y democráticos como los de los otros y que se resumen en que no quieren que la Monarquía sea nuestro sistema de gobierno.
Este columnista del monárquico ABC comienza su soflama haciéndose esta pregunta retórica que rezuma cachondeo: ¿Qué ha pasado con esas banderas republicanas que no se os caen de las manos en las manifestaciones, hijos míos?, en el artículo Y ni una sola bandera republicana
“…Y nada hablo de las banderas republicanas, de las que ya dije que les sacan tan mal el color histórico de la franja morada, tan virado a sudaca, que parecen como de algún país hispanoamericano más que una antigualla anticonstitucional.
¿Que hay una manifestación de los trabajadores de una fábrica
que va a cerrar tras el ERE? Allá que está, y no sé por qué, la bandera
republicana
¿Que los estudiantes se echan a la calle para protestar con ese
plan que tiene nombre de mortadela italiana de la buena, Bolonia? Allá que está
la bandera republicana.
¿Que son los artistas del pesebre de las subvenciones
los que se manifiestan por algo que beneficia mucho al PSOE y le da una patada
en los mismísimos al PP?
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