La matanza que no ha llegado a producirse a las 4 de la madrugada
Cuando julio está a punto de terminar, cuando, debido al intensocalor, todo el mundo está en una especie de modorra que tiene a lossentidos menos vigilantes, hay alguien que no descansa, alguien que,carente de toda lógica y sentido común, persiste en alcanzar susobjetivos cuando ya hay voces dentro de ellos mismos que avisan de quetodo es para nada, que mediante sus acciones no van a conseguir que elEstado de Derecho ceda un ápice, sólo un terror que ya es unanacronismo en una sociedad muy evolucionada y que pasa de estas historias, pero no acaban de convencerse.
Cuando julio acaba el desayuno que nos tenía preparado la banda,que, sobre todo, les tenía preparados a los guardias civiles de Burgos,son 200 kilos de explosivos cargados en un vehículo, que “sólo” haprovocado 54 heridos leves: cortes y pequeñas heridas, pero que, al nohaber habido aviso previo, podíamos estar ante una matanzaindiscriminada que al parecer era lo que buscaban.
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