Primer Roland Garros, de los 8 que posee, en 2005
Rafa Nadal, con la victoria de ayer sobre el suizo Wawrinka, se asegura continuar de nº 1 del mundohasta, como mínimo, el mes de marzo de 2014, es decir, unas 20 semanas más en la cima del tenis mundial. Esta hazaña –nadie daba un duro por él (ni él mismo), después de una grave lesión en la rodilla a lo largo de siete meses- es la tercera vez que la consigue, antes en 2008 y 2010, lo que lo coloca en sexta posición en este apartado:
Ivan Lendl y John McEnroe con 4, Jimmy Connors y Roger Federer con 5 y Pete Sampras con 6. En cambio está en el podio del tenis mundial, al tener 13 grandes, por detrás de Sampras (14) y Federer (17). No sabemos dónde estarán sus límites, a la vista de su juventud, 27 años, y si es respetado por las lesiones.
El único rival en estos momentos es Novak Djokovic a quien le vemos en este final de temporada poderes casi paranormales pues parece poseer cualidades hipnóticas sobre sus rivales, siendo sus últimas víctimas Federer y el bravísimo Ferrer: no se explica que llegando en los dos sets con 5-4 y saque a favor no fuese capaz de rematarlo. Lo explica el poder de la mente del serbio.
Lo cierto es que hoy toca habar de las excelencias de Nadal del que durante mucho
tiempo hemos afirmado que era el único valor seguro que le quedaba a España, sobre todo si lo comparamos con ciertos petimetres de la clase política que se creen el ombligo del mundo. Fíjense si no en las memorias que está presentando uno de ellos estos días y que dan vergüenza ajena: no se puede ser más fatuo.
Y ya sin ningún tipo de contaminación, donde se habla de lo puramente tenístico, un homenaje a Nadal en el Blog | Match Ball:
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La leyenda de Nadal se agiganta
