Ayer en Burgos en un atentado que podía haber ocasionado decenas de muertos y hoy con dos víctimas mortales.
Enel de Burgos, como dice Antonio Casado, la suerte cayó del lado de losbuenos, ya que el lugar donde fue estacionado el vehículo es unaexplanada de tierra, sin urbanizar, o sea, “sin reflejos de onda”, quepuedan amplificar el efecto destructor de la explosión, situada en laparte trasera de las instalaciones de la Benemérita. La suerte o losescasos conocimientos de los malos en materia de “reflejos de onda”.Eso dicen los expertos policiales respecto al hecho de que los etarrascolocaran la furgoneta-bomba en una explanada de tierra. Un profundocráter de 14 metros cuadrados pero sin los “reflejos de onda” quehubieran multiplicado los efectos destructores debidos a la explosiónde ayer: cuantiosos daños materiales en los exteriores del edificio yunos 60 heridos, ninguno de gravedad, lo que se explica porque los dormitorios están colocados en el lado opuesto del edificio además de que, al parecer, el coche bomba no estaba orientado correctamente.
Si han sido más eficaces en el atentado de Palmanova:
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