
Una vez que el cuerpo ha entrado en caja después de la victoria ante Croacia, no está de más recordar -en fútbol como en tenis los organizadores quieren que lleguen a las fases finales los favoritos- que hubo cierta benevolencia arbitral (aquí les llaman a esos trencillas “caseros”) por no señalar dos presuntos penaltis – un plantillazo de Sergio Ramos y un claro agarrón de Sergio Busquets- y un pase a Iniesta, rozando el fuera de juego, que originó el gol de Navas, el Desatascador (llamado reiteradamente por los locutores “Jesusito” , o el cursi “Iniesta de mi vida”)
Tuvimos más suerte de la que estamos teniendo con la prima de riesgo que ayer se colocó al borde de los 600 puntos: ya deberíamos estar siendo rescatados, si se me permite esta perífrasis verbal, de lo que ya solo nos puede librar el que nos cobijemos bajo el manto de la Virgen del Rocío –Fátima Báñez dixit-. Si quieren una explicación del fenómeno que nos trae locos a todos, ahí tienen a Ignacio Escolar y sus respuestas a Por qué sube la prima de riesgo:
1. La prima sube porque es un buen negocio.
2. La prima sube porque no se conocen los detalles del rescate. “.
3. La prima sube porque el Gobierno no ha entregado prendas (y lo ha hecho fatal).
4. La prima sube porque puede que España no vaya a pagar
Como consecuencia de ello –y sin que hayan servido absolutamente para nada hasta el momento- los recortes van a continuar. Y hay quien, como el impresentable Salvador Sostres en El Mundo, sigue aportando tremendas soluciones a costa de los funcionarios (menos mal que hoy no habla de bajar las pensiones un 40 %):
“Reducir un 40% nuestra masa funcionarial y a los que queden bajarles, de promedio, un 60% el salario;apostar por la concertación en la educación y por el copago en la sanidad, entender que ni maestros ni médicos tienen que ser funcionarios y que el servicio universal no implica que las redes de escuelas y hospitales tengan que ser públicas. Y entender también que lo público no se tiene que usar de un modo indiscriminado, sino que hay que reservarlo para aquellos a los que real y demostradamente les haga falta y no se lo puedan procurar, por algún motivo extraordinario que habrá que estudiar en cada caso, con lo que ganan trabajando”.
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