Paco León,
el desternillante y
polifacético actor sevillano que llegó a la fama por sus actuaciones
memorables en la serie televisiva Aída, es el único
de los 15 artistas que participaron en el vídeo
contra la impunidad de los crímenes del franquismo
presentado
esta semana que no ha tenido que
actuar. Es el único que no se ha tenido que poner en la piel de
aquellos que sufrieron en las carnes de su familia las
atrocidades de los crímenes de la guerra civil porque su
bisabuelo fue uno de los miles de ciudadanos pacíficos que
fueron detenidos arbitrariamente y después fusilados.
El actor Paco León no
tuvo
que hacer muchos esfuerzos para hacer su papel, el personaje a
interpretar lo tenía en casa, en la memoria de su familia:
se metió en la piel de su bisabuelo, Joaquín, maestro en un pueblo de
Sevilla. “Uno de mis alumnos me denuncia por republicano y me detienen.
Mi hijo mayor me lleva comida a la cárcel hasta que un día le dicen
que ya no hace falta. Me han fusilado. No tuve juicio, ni abogado, ni
sentencia. Mi familia y mi bisnieto, Paco León, me siguen buscando.
¿Hasta cuándo?”.
Su bisabuelo forma parte
de esa legión de
maestros que fueron exterminados por el Régimen. En La
Memoria Histórica y los maestros leemos entre
otras cosas:
“Está
documentado que fueron combatidos con gran saña por
ser considerados unos peligrosos enemigos públicos y sostén de
la República, aunque únicamente poseyeran las
mortíferas armas de la tiza, el borrador, el amor por la verdad y el
conocimiento, la bonhomía y muchas carencias económicas que no del
ánimo. En fin, uno de los estamentos a batir y con mayor
facilidad: sesenta mil maestros fueron depurados
durante un número indeterminado de años y privados de sus derechos y
bastantes, pasados por las armas”
Tag:
política
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