Refrescando un poco la memoria: el monte Parnaso es el lugar donde tenían su morada las Musas y por extensión la patria simbólica de los poetas y de los autores de las más prestigiosas obras artísticas y literarias. Y a ese mítico lugar ha ascendido, gracias al favor y al fervor popular, una princesa del pueblo, de pandereta y cartón piedra, que ha “escrito” un libro, Ambiciones y reflexiones. Nos referimos, claro está, a Belén Esteban, la otrora Flor de San Blas, denominación que ha perdido al mudarse recientemente al pueblo de Paracuellos del Jarama, de funesta fama por su protagonismo en la mal llamada por algunos Cruzada de Liberación y por ser usado como arma arrojadiza precisamente por quienes se consideran vencedores de aquella masacre entre hermanos.
Todo ello ha dado lugar a que en el Parnaso estén de luto por el ingreso de tan espuria autora cuya obra el pueblo llano ha convertido en best seller, permítaseme el anglicismo, ya que es el que lo ha comprado y ya sabemos que desde hace tiempo y en algunos casos la literatura poco tiene que ver con lo artístico y sí mucho con la mercadotecnia. El Planeta sin ir más lejos. Y casi cuatro siglos después los versos de Lope de Vega siguen desgraciadamente vigentes:
“el vulgo es necio y pues lo paga, es justo
hablarle en necio para darle gusto! “
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