En este país se ha acabado la unanimidad hasta para las buenas acciones, como el hecho que uno de los hombres más ricos del mundo, Amancio Ortega, done esa respetable cantidad a Caritas. Siempre hay quien le saca punta a todo, hasta a un gesto caritativo, como la escritora Lucia Etxebarria, que publica en su Facebook: “si el señor Ortega dona 20 millones de euros da de comer a 1600 familias durante un año. Además, se hace publicidad y desgrava impuestos. Pero si deslocalizara la fábrica de Tánger y la trajera a España ( y no hablo de las fábricas de Turquía, India, o China), y creara en España 1600 puestos de trabajo, daría de comer a esas 1600 familias durante diez año”. Primero hay coger el pájaro en la mano de los millones, después que deslocalice un poquito el Sr. Ortega.
Otros, indudablemente para quitar mérito a la noble acción del plutócrata sacan unos datos que dicen que:
- está entre el tercero y el quinto más rico del mundo. Se le calculan unos 36.000 millones de dólares, más que Warren Buffett, 35.000, y algo menos que Bill Gates, 48.000.
- Ortega, no se ha sumado a la petición de sus compañeros de millones para pedir que se subieran los impuestos a los ricos, ni tampoco a la campaña de Gates y Buffett, The Giving Pledge (La promesa de dar) para conseguir que los hombres más ricos donen al menos el 50% de su fortuna en vida o como herencia, filantrópicamente: Gates donaron a su fundación casi 18.000 millones de euros, mientras Warren Buffett aportó incluso más: 28.551 millones de euros.
- su empresa Inditex desde 2007 a 2011 ha pagado sus impuestos por sus ventas on line en Irlanda, donde se beneficiaban de un tipo único del 12,5%. Cuando esto se supo anunció que a partir de 2012 pagaría esos impuestos en España.
Sin embargo los acostumbrados chicos del coro solo se quedan en el detalle de los 20 millones y… arremeten contra los que osan criticarlo, contra los tontos de la izquierda Visa Oro, los golfos de los sindicalistas, los progres de mierda. Entre otros, sobre todo por lo soez del vocabulario y extremadamente demagógico, ya habrán adivinado que no pueden faltar a la cita ni el de la alta cuna Alfonso Ussía o el de Cai, que nació en Sevilla porque los .gaditanos “nacen donde les sale de los c…”, Antonio Burgos. También se les une el fino banderillero Ignacio Camacho López de Sagredo, los tres desde las tribunas cada vez más conservadoras deLa Razón y ABC.
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