Algunas exquisiteces de Gustavo Bueno (y de Pedro Aparicio) sobre Zapatero
Entre unos y otros están dispuestos a amargarle a Zapatero su quinto año de mandato e incluso algunas voces- fuego amigo-están cuestionando su candidatura para 2012. Hay otras voces, como las que hoy traemos, una la del filósofo Gustavo Bueno, otra la del socialista Pedro Aparicio no sabemos si aún parlamentario europeo, que se la han liado parda, como ahora gusta decir a la gente. En su defensa de su jefe sale Rubalcaba: "Tengo mucho cariño personal a Zapatero, mucha estima política"
Va el filósofo Gustavo Bueno en la presentación de su libro “El fundamentalismo democrático”, donde examina la democracia a la española y pone a parir-dicho sea esto en sentido figurado- a Zapatero y Zerolo. Si ven el vídeo escucharán sus desahogadas palabras. Dice entre otras: "Hay más corrupción en la ley del aborto que en el caso Gürtel o en Filesa", “las posibilidades de que estén asociadas corrupción y política son muy grandes” y pone como ejemplo el PER. "Se está pagando a los jornaleros para que voten al PSOE".(Ni Arenas lo expresaría mejor). Y a Zapatero: "No lo conozco ni quiero conocerlo y además me importa un pimiento. No le tengo la menor aversión, le tengo desprecio absoluto por las cosas que dice", "Esto es muy difícil llegar a entender que alguien diga que está en un "estado de felicidad democrática, cómo alguien lo puede decir de verdad". También repasa los “orgasmos democráticos” de Zerolo: "Es muy difícil creer que esto lo dice sinceramente. Es un hombre que tiene la maquinaria lógica desengrasada y entonces quiere hacer una metáfora y dice eso".
Y Pedro Aparicio, ex alcalde de Málaga por el PSOE, escribe en SUR “El gran timonel” y quizá sea mejor ofrecerlo enterito para que vean cómo está el patio de las huestes socialistas que de alguna manera se sienten defraudadas. Lo de las confluencias planetaria de Pajín y lo de que la tierra pertenece al viento han dejado anonadado a este médico que tan buena pluma posee, dicho en sentido literal:
"Comienza el año con 4,5 millones de parados, 200.000 empresas destruidas y un déficit público seis veces superior al de hace doce meses. Sin embargo, la economía no es lo más grave. Lo peor es que quien lleva el timón para sacarnos del atolladero, siga asegurando que nuestra recuperación es inmediata y nuestro futuro envidiable. Despidió 2008 anunciando: «en 2009 habrá un rápido crecimiento que se traducirá en creación de empleo neto durante el último trimestre». Pues bien, aquí sigue el mismo 'líder', un año después, tan seguro de sí mismo como entonces. Acaba de declarar (prensa de anteayer) que «se enorgullece de su gestión en la crisis», y que «su ideología le impide pactar para salir de ella». Mao Tse-tung lo tuvo igual de claro: uno de los preceptos de su 'Revolución cultural' disponía ejecución o prisión perpetua para los políticos que sacrificasen la ideología a la economía.
Desde ayer, y durante un semestre, Zapatero presidirá la Unión Europea. Viví desde el Parlamento Europeo las dos presidencias anteriores, a cargo respectivamente de González y de Aznar. De ambas -eficaces, serias, europeístas- me sentí orgulloso. Eran tiempos de rigor y consenso. Éstos lo son de 'confluencias planetarias' y la simple eficacia se ha devaluado. Así que me temo lo peor.
Temo especialmente los discursos 'marca de la casa' con metáforas cursis, progres y ramplonas. El último ha sido el de «la tierra no pertenece a nadie. salvo al viento». Lo malo no es la gilipollez en sí misma (cuantos tuvimos que hacer discursos a diario, seguramente dijimos bastantes); lo malo es que te la haya escrito otro. Y que la leas con ademanes de genio, convencido de que vas a extasiar a tu público. ¿Imaginan al nuevo presidente soltando ante los europeos alguna de las que le han dado fama? Mezclaré una leyenda europea y wagneriana con un conocido chiste: Sigfrido, angustiado por la crisis y el paro, gime: «El miedo ciega mis ojos / ¿hay aquí alguien que pueda ayudarme?» Zapatero responde: «Yo te ayudaré: Europa es del viento, el paro se debe a un empleo excesivo y there is everybody bonsáis». Sigfrido le mira asustadísimo y musita «¿Hay alguien más?»
Aunque peor sería oírle otro tipo de discurso, que podríamos denominar de 'estilo faisán'. Por ejemplo: «Conviene que la Unión Europea establezca con Al-Qaeda un proceso de paz, en el que no haya vencedores ni vencidos.»
De la autocomplacencia, líbranos Señor. En agosto del 34 Azaña recibió en Barcelona una comida-homenaje, a cuyos postres pronunció un discurso histórico. Terminó así: «Todo político debe llevar en su conciencia un antagonista incansable que le obligue a analizar sus actos y los someta a una crítica despiadada. Se me censura, como defecto del carácter, llevar siempre sin ocultarlo, este riguroso acompañante; pero esa es mi ventaja respecto a los demás». Aunque Azaña y Zapatero sean personajes tan contrarios, deseo que éste tenga éxito en su presidencia; será también el éxito de la Unión. Eso sí, espero que triunfe con poquitos discursos. Y, si fuera posible, con ninguno "