
Aunque aquí el personaje importante es Guillermo Cabrera, yafallecido, queda su atractiva obra literaria y la memoria de su vida nomenos atrayente, ponemos en primer lugar a su mujer por cortesía y sobretodo porque fue su cómplice, amante, esposa y enfermera y ahora sueditora, según indicaciones del propio Guillermo: “Solo tú lo puedeshacer porque conoces las claves de mi humor y mis gustos literarios y sexuales”.
Y hemos dejado en último lugar a los protagonistas del Conciertopor la Paz, que se han visto en medio de dos fuegos, el del supuestofuego amigo y el de aquellos, de ideología inclasificable, que losconsideran “titiriteros”.
Aunque la obra que catapultó a la fama a Guillermo Cabrera es “Trestristes tigres” fue en “La Habana para un infante difunto”, en parteautobiográfica, donde quedamos ya definitivamente captados por su usoingenioso del lenguaje que desemboca en un estilo en el que abundanlos juegode palabras, retruécanos, agudezas, paronomasias, hipérbaton,traslaciones idiomáticas, algo que, ya de por sí, encanta a losadmiradores de los prestidigitadores de las palabras, aunque no hastael extremo, como un crítico, de ver en su estilo “un intento deimitación del ritmo sincopado del jazz”
Tag: literaturaComparte este artículo
Continúa leyendo...