Del hip hop de Ortega Cano al rap de Bernat Soria

El Gobierno español recurre al hip hop para frenar los embarazos de adolescentes

Creíamos que ya habíamos vivido situaciones penosas durante la contemplación de algunos programas de televisión, momentos de sublimes ridículos, cuando hete aquí que en un programa-recaudatorio de  fondos para buenas causas-los premios suelen estar destinados a causas nobles- cuando en las últimas semanas , en los generosos descansos que tele 5 nos brinda durante la serie americana  del CSI , miramos “Mira quién baila” en la 1 de TVE, la de todos, sobre todo la de los que gobiernan, y así se nos pone por delante  Ortega Cano, no danzando el ritmo ancestral de la fiesta con un miura, sino bailando el hip-hop o disfrazado de rockero, acompañado, eso sí de bellas y gráciles señoritas que quitan el hipo con sus estilizadas y armónicas  líneas corporales, o Ana, la Bióloga, echando el bofe con sus contorsiones y malabarismos que han hecho que haya necesitado tratamiento médico en un par de ocasiones. De todas formas hay que agradecer el espectáculo inenarrable que ofrecen ambos, a los que somos más viejos no deja de conmovernos esta rebelión de los cincuentones, que además lo hacen por una buena causa, lo que hace que el sonrojo que producen sea más soportable y llevadero. .

Sin estar aún repuestos de lo anterior esta mañana hemos sido golpeados de nuevo con el visionado de un vídeo del Ministerio de Sanidad  en el que se anima a los jóvenes  a usar el condón en las relaciones sexuales para evitar embarazos y la alarmante  subida de los siempre traumáticos abortos de adolescentes. Aunque antes de verlo ya veníamos predispuestos en su contra por las soflamas de Carlos Herrera y de Federico que,  para atacar al ministro socialista Soria, se meten con el lenguaje empleado diciendo que no es el que actualmente usa la juventud sino el usado cuando ellos asistían a los guateques o que en todo caso  es propio de algunos horteras y macarras. (El otro día ESPE saludó a la prensa diciendo: ¡ Hola, troncos…!, o sea, un lenguaje trasnochado)

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