“El mal gusto y la depravación se
han instalado en la Universidad Complutense. Ayer, hacia la una de la
tarde, un numeroso grupo de chicos y chicas entró en la capilla del campus de Somosaguas y tras leer en voz alta sus críticas hacia la Iglesia Católica y proferir insultos contra el clero, varias de las jóvenes, rodeando el altar, se desnudaron de cintura para arriba entre
los aplausos y vítores del resto de los gamberros. El capellán intentó
que desistieran de su empeño y dejasen de molestar. Inútil. Llegó incluso a ser zarandeado por los energúmenos. Una alumna que estaba rezando cuenta que dos de las gamberras, ya sin ropa hicieron alarde de su tendencia homosexual. Otros de los agredidos verbalmente han puesto en duda que los exhibicionistas hubieran hecho lo mismo en una mezquita iraní o pakistaní”
Este es más o menos el relato de unos hechos cuyos
protagonistas asumen menos ser los autores de las tremebundas y
amenazantes pintadas en la fachada de la capilla, tales como “Arderéis como en el 36″.
Este lamentable hecho que es un síntoma de cómo han
cambiado las cosas en España, por lo menos en algunos sectores, ha dado
pie para que de nuevo resuenen las trompetas apocalípticas anunciando
nuevos “zarpazos anticlericales en la España de Zapatero” haciendo un
recuento de los mismos y remitiéndonos al vivido durante la Segunda República y que ya recordó Benedicto XVI en pleno vuelo a los periodistas:
Tag: religionComparte este artículo
Continúa leyendo...