Me apuesto algo a que el título os recuerda al Prestige y a su autor Mariano Rajoy, el sucesor del infausto ZP, experto en frases enrevesadas y tautológicas y que pasará a la historia por ser aquel que puso a los pies de los caballos de los especuladores del mundo mediante un peligroso rescate a ese país llamado España, a la sazón en peligro por la acción de algunos mesiánicos iluminados, de manera que, entre el rescate y esas fuerzas centrífugas, a ver qué queda de nosotros.
El Prestige, 10 años después, vuelve a estar de moda: en esta ocasión el motivo es el inicio del juicio en la Audiencia Provincial de la Coruña, tras 10 años mareando la perdiz en el que la fiscalía eleva a 4.442 millones la reclamación de daños y donde la principal cabeza de turco es el capitán del barco, de manera que, al estar el asunto sub iudice, vamos a ¿divertirnos ? con la gran cantidad de literatura atrevida y errónea que se produjo a raíz del suceso, y en la que se lleva la palma lo de los hilillos de plastilina por los que pasará a la historia Mariano:
“En estos momentos, la estructura se encuentra deformada. Hay planchas dobladas hacia adentro. Se piensa que el fuel está aún enfriándose, salen unos pequeños hilitos, los que se han visto, hay en concreto cuatro regueros que se han solidificado con aspectos de plastilina en estiramiento vertical. Debe salir de alguna de las grietas. Están los técnicos estudiando que significa eso”
Lo de los hilillos no es la única ocurrencia de Mariano. También dijo: “La marea no va a llegar a las Rías Bajas”, ”Afecta a una parte importante de La Coruña, pero no es una marea negra”
“A una profundidad de 3.500 m. y a dos grados de temperatura, el fuel estaría en un estado sólido, por lo que, en principio, el combustible no se verterá
“El fuel no debe llegar a la costa pero se han tomado todas las medidas posibles”
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