De excesos verbales y gestuales y lo que se cocina
Queremos pensar que son fenómenos marginales que no perturban lamarcha del país que bastante tiene con la crisis económica globalaunque la que nos importa es la particular, la de cada cual, la de cadabolsillo, que, según todos los indicios, va a verse aumentada por elprorrateo de las deudas de aquellos otros que no pueden pagar sus hipotecas, ni sus coches o cualquier otro gasto en que se metieron sin medir el alcance de la deuda y de si podrían pagarla: al final, con el dinerode todos los que están en ese segmento medio de la población quesiempre ha procurado controlar el gasto, se intentarán arreglar losdesaguisados que se cometen, salvo honrosas excepciones, alegremente.
Y queremos pensar que son fenómenos marginales aunque no económicos los que se producen cada día en la vida ¦3¦y que podemos calificar de violencia verbal e institucional, como puedeser la fallida colocación de la placa de la santa sor Maravillas,nacida en la carrera de San Jerónimo, y que ha sido preterida poralgunos y preferida por otros, aunque al final se haya impuesto lateoría de los que quieren ver antes emplacados a la Pasionaria y a DonManuel Azaña, el del “Jardínde los frailes”, no sin antes haber retumbado en las paredes delCongreso las sibilinas palabras de José Bono llamando a sus compañerosde partido hijos de madre de vida alegre, vulgo izas, rabizas ycolipoterras, para disgusto de algunos y que ha merecido el ingenio demuchos-Juan Barranco- y la incomprensión de pocos: “Son la cosas deBono, una vela encendida a Dios y otra a Satanás”.
O las exageraciones de Rodríguez Madero sobre Jiménez Losantos: “Esepequeño ayatolá que babea y que no hace otra cosa que criticar a lagente” “Me echaron de la COPE por no hablar catalán. Eso Losantos no lodice porque no tiene huevos” o sobre Luis del Olmo: “fue un miserableconmigo y ahora lo ha vuelto a ser. Es un mal individuo”.” O de Pío Moacuando afirma de Franco que es el políticode más envergadura de los últimos 200 años o los 50 nostálgicos deFranco que el 20-N cantaron el “Cara al sol” y gritaron “¡ArribaEspaña!” en Santander ante la última estatua de Franco.
Tags: política, sociedadComparte este artículo
Continúa leyendo...